SEÑALES DE ALARMA EN LA CONDUCTA SUICIDA. EN EL ÁMBITO EDUCATIVO.

En la prevención del suicidio el primer paso es la identificación de la ideación suicida, así como la evaluación del nivel de riesgo. Dentro del ámbito escolar cualquier miembro de la comunidad educativa puede detectarlo. Puede ser un profesor, el orientador/a y también los compañeros. Ya sea directamente o de forma indirecta, a través de un escrito o comentario, de forma manifiesta o encubierta, normalmente encontramos señales de alarma que nos permiten actuar.

En principio consideraremos señal de alarma cualquiera de las siguientes situaciones:

·       Cuando cualquier docente detecte varios factores de riesgo

·       Cuando el orientador/a constate el riesgo

·       Cuando la familia trasmita su preocupación sobre la situación emocional o la salud mental de su hijo/a

·       Cuando se ha comunicado por un recurso asistencial

·       Cuando se produzca una verbalización o

·       Cuando se presenten acontecimientos autolíticos

Si las señales de alerta son de tipo verbal y el alumno/a manifiesta comentarios de muerte, desesperanza o despedida (“No tiene sentido vivir así” “A nadie le importa que yo siga aquí” “siempre has sido un buen amigo”..) la detección es más fácil. En cambio, cuando las señales son conductuales es más difícil de identificar. Abandono físico, dificultades de concentración, aislamiento, tristeza o cambios repentinos de patrones conductuales…no siempre van a ser identificados y en caso afirmativo no necesariamente asociados a conducta suicida.

A.   SEÑALES DE ALARMA VERBAL

§  Sentimientos de desesperanza…. “no tiene solución” “Esto no mejorará nunca”

§  Desesperación. Considera que no puede soportarlo más

§  Desamparo. se siente solo, que estorba, que no le importa a nadie…

§  Culpa, vergüenza y odio hacia sí mismo… “no valgo nada”

§  Comentarios sobre la muerte…. “me gustaría desaparecer”, “necesito descansar”

§  Despedidas inusuales…. “que sepas que has sido un buen amigo” “siempre te querré”

§  Expresar abiertamente deseos de quitarse la vida.

Cualquier señal de alarma merece máxima atención y siempre ser tenida en cuenta. Algunos jóvenes, después de verbalizar algún comentario, es posible que minimicen estas ideas; “Era broma”, “no lo decía en serio”... Si en su comentario no encuentran la comprensión y aceptación que necesitan es posible que intenten disimular aquello que se les ha “escapado”. Sí así fuera, estaríamos perdiendo la oportunidad de contactar con él/ella para ofrecerle ayuda, lo cual podría suponer no solo un retroceso sino también un motivo para el aislamiento y la incomunicación.

B.    SEÑALES DE ALARMA NO VERBAL

§  Cambio repentino en su conducta habitual

§  Búsqueda de mecanismos para hacerse daño

§  Retraimiento social/aislamiento Anergia (falta de energía)

§  Actitud pasiva, apatía, tristeza…

§  Descuido en la apariencia personal

§  Dificultades de concentración y memoria

§  Alteración de los patrones de sueño y alimentación

§  Cerrar asuntos pendientes; regalar objetos personales, cerrar cuentas en redes sociales, despedirse de personas….

§  Conducta no verbal significativa cuando preguntamos sobre ideación suicida; llanto, mirar al suelo.

En cualquier caso, encontrarnos ante una de estas señales siempre nos lleva a identificar a un alumno/a vulnerable y un alumno vulnerable siempre es susceptible de ayuda independientemente de si ello va o no asociado a conducta suicida. No sabemos cómo va a evolucionar un joven ante una época difícil de su vida. Por otra parte, hay que tener en cuenta que desde que aparece la ideación suicida hasta que se produce el intento autolítico puede llegar a pasar un año o más. Por tanto, una señal de alarma nos brinda una oportunidad de oro para la prevención.

Ahora bien, ¿qué debemos hacer cuando nos encontramos ante estas señales de alarma?. Si hay verbalización suicida valorar el riesgo, pero si no la hay habrá que sondearlo. Muchas personas temen hablar de suicidio por el temor de que ello pueda servir para precipitarlo pero también por la incomodidad que puede suponer este tema; no saber qué decir, cómo abordarlo, qué contestar.

Si necesitas ayuda estamos a vuestra disposición.

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